El Pabellón Polideportivo Fernando Martín está distanciado apenas un kilómetro del Parque de la Fuente en Fuenlabrada. Es el radio que separa los actos de cierra de campaña del PSOE y de Vox. Dos partidos que, según las encuestas, se han beneficiado de la polarización que ha marcado este campaña, de la que los socialistas han hecho palanca pidiendo el voto como "antídoto contra la ultraderecha de Feijóo y Abascal". Pero hay un nombre que ha eclipsado el esprint final hacia las urnas: Begoña Gómez, mujer de Pedro Sánchez. En el pabellón polideportivo se daban pulseras con el mensaje "Free Bego".
La mujer del presidente, que no asistió al acto de cierre de campaña en Fuenlabrada que congregó a 4.500 personas, según la organización, fue una de las protagonistas del acto aunque nadie la mencionó de manera expresa. A ella se refirió Javier Ayala, alcalde socialista de la ciudad, al querer "mostrarte (Pedro Sánchez) mi solidaridad porque debe ser que vamos muy bien cuando hacen estas cosas", dijo en alusión a la decisión del juez.
Mas claro fue José Luis Rodríguez Zapatero, que ha sido uno de los grandes activos del partido también en esta campaña. "Ha sido una campaña electoral extraña por cosas que han pasado. Se rasgan las vestiduras porque digamos que una citación judicial en campaña es extraño. Y extraño es decir algo prudente y moderado. El principio esencial de la democracia es la libertad de expresión, y en la libertad de expresión está valorar las decisiones que se toman en campaña electoral".
Alusión velada también de Sánchez. "Agradezco el apoyo que tanto a mi familia y a mi no estáis dando desde la organización. No soy ingenuo. Sé por qué lo hacen. No porque me llame Pedro Sánchez, sino porque soy presidente de un Gobierno que ha subido el salario mínimo. Hay poderes a los que no les gusta que hayamos aprobado la reforma laboral, hayamos puesto un impuesto a la banca, energéticas, grandes fortunas... que seamos un gobierno feminista... Esos poderes son invisibles pero algunas veces se visibilizan".
El presidente del Gobierno llegó a Fuenlabrada con buen humor. Buenas sensaciones. Cree, de verdad, en la remontada, en que el domingo su partido puede jugar de tú a tú al PP. "Empezaron la campaña diciendo que iban a arrasar, a ganar de 10 puntos. Ahora están pidiendo la hora y diciendo que vamos a empatar. Pero van a perder el partido".
Movilizar medio millón de votantes
Su buen humor lo constató que empezó y terminó el mitin bailando. Sin que nadie le incitara. Al principio al ritmo de Highway to Hell de AC/DC, aunque él espera que el 9-J sea una carretera al cielo de la victoria. Y mientras bailaba se ponía un camiseta encima de su ya mítica camisa vaquera mitinera, con el lema 'Somos Zurdas'.
Sánchez enfatizó el mensaje de ir a votar, pero sobre todo, de que los suyos vayan a votar, que nadie se quede en casa. En esta campaña, uno de los propósitos del PSOE ha sido movilizar entre medio millón y un millón de votantes "habituales nuestros que se suelen quedar en casa y que nos son clave para ganar las elecciones. Porque es el objetivo: ganar", señalan los estrategas de Ferraz.
De ahí la apelaciones: "¿Os apetece daros el gustazo el domingo de ver a Feijóo y a Abascal perder las elecciones?", ha preguntado a su aforo. ",Tengo unas ganas de darme el gustazo de ganar a Feijóo y Abascal que estoy contando las horas". Y más arenga: "Los zurdos vamos a votar para frenar a la ultraderecha y para defender a Europa, como hicimos el pasado 23 de julio, como hicimos en Cataluña y lo vamos a hacer para defender a Europa".
Y es que los datos de la encuesta de Sigma Dos para EL MUNDO publicada el lunes por la noche señalaba que a una semana de coger la papeleta, un 5,9% de los 7,3 millones de personas que votaron al PSOE en 2019 aún no había decidido su voto. Esto es, contaba con 434.217 indecisos. Un porcentaje de indecisos más alto que el del PP (4,4%), Podemos (5,2%) y, eso sí, más bajo que el Vox (7,4%).
"La disyuntiva es clara. O estamos con la justicia social o estamos con Milei. O estamos con la paz o estamos con Netanyahu, o estamos con el feminismo o estamos con Abascal, o estamos con el juego limpio o estamos con Feijóo, o estamos con la convivencia o estamos con Aznar".
'Trends' para atraer a los jóvenes
En esa estrategia para movilizar voto, evitar que los suyos se queden en casa, se apela con mucha insistencia a mujeres y jóvenes. Estos últimos han tenido mucha importancia en el desarrollo de la campaña, en la captación de atención en las redes sociales. "Intentar llamar la atención y generar estas emociones hacen que la comunicación se tenga que adaptar al medio en el que se encuentra", dicen en el PSOE.
Para ello, han intentado poner en marcha distintas acciones (sobre todo en TikTok) aprovechando dos tendencias de actualidad, llamados 'trends', para acercar las políticas del PSOE a la gente que utiliza esta red social. Por un lado, con la historia de 'La Puchaina Psoista'. Consiste en cómo hacer viral la historia de un aguacate socialista hecho con inteligencia artificial. Para ello buscaron el factor sorpresa, que fuera inesperado para el público (lo que hace que se comparta mucho dentro de la red social) a través de una tendencia de actualidad.
Pero, además, este aguacate no solo es algo que ha generado impacto, sino que ha transmitido un mensaje político a través de su historia: la lucha contra la extrema derecha.
Otro ejemplo: las pulseras de Taylor Swift. Con motivo de sus conciertos sus fans se intercambiaban pulseras. Así grabaron un vídeo de Pedro Sánchez y Teresa Ribera intercambiándose estas pulseras. Con ello buscaban no solo usar este tema de actualidad para generar más interacciones, sino que era una manera de acercar a un estrato de población más joven a ambos líderes