- La motosierra Santiago Caputo: el sex symbol que maneja en la sombra los hilos del Gobierno de Milei
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Hace ya muchos años que la política argentina es una salsa de apodos, mitos y curiosos personajes dueños de un volumen de poder tan asombrosos como inesperado. Nadie representa eso hoy mejor que Santiago Caputo, el asesor todoterreno de Javier Milei. El joven Caputo, integrante de su "triángulo de hierro", según el presidente, es conocido como elmago del Kremlin. Casi nada.
Junto con Karina, la hermana del presidente y poder último en la Casa Rosada, Caputo hace y deshace, tiene influencia y palabra decisoria sobre todo tipo de temas. Por eso es lo de "mago del Kremlin", el título de una novela del politólogo italiano Giuliano da Empoli.
A veces, claro, tanto poder y tanta aceleración -Argentina es un país en el que en un día pueden pasar demasiadas cosas- le juegan malas pasadas. Le sucedió en febrero, cuando irrumpió durante la grabación de una entrevista y forzó al periodista Jonathan Viale a modificar una pregunta incómoda que le había hecho a Milei. Y volvió a sucederle el 1 de marzo, el día de apertura del año parlamentario, cuando se trenzó en los pasillos en un violento intercambio con un diputado opositor, Facundo Manes.
¿Está descontrolado el mago del Kremlin"?
"Desde que se convirtió en el ideólogo supremo de Milei, Caputo se mueve con un aura de misterio en el nuevo ecosistema del poder", señaló recientemente La Nación. "El gran titiritero del relato oficial ejerce su influencia en las áreas más sensibles de la administración, como la SIDE [servicios de inteligencia], donde colocó a Sergio Neiffert, o la ex-AFIP [Hacienda], y se inmiscuye directamente en decisiones de ministerios, empresas estatales u organismos públicos, donde coloniza áreas con soldados fieles. Alter ego de Milei, Caputo quedó a cargo del control y la gerencia del Estado. Dicho de otro modo: maneja la botonera para satisfacer las demandas del presidente".
Cuando se habla de un Caputo como "gerente del Estado" hay que destacar la curiosidad y la contradicción: Milei sigue diciendo que su deseo último es destruir el Estado, eliminarlo. Una utopía libertaria. No se sabe qué piensa Caputo, al que no pocos y pocas ven en Argentina como un sex symbol: camisas y chaquetas entalladas, cigarro entre los labios, mirada entre soñadora y exaltada. En todo caso, si alguien está disfrutando del poder del Estado, además de los hermanos presidenciales, ese es Caputo.
"En el séquito de Caputo hay funcionarios, legisladores y, sobre todo, referentes de la militancia digital que lograron puestos codiciados en el Estado o influyen en la toma de decisiones. Tienen afinidad ideológica con Caputo, se autoperciben como el brazo protector de Milei en la 'batalla cultural' contra el kirchnerismo e integran la agrupación 'Las Fuerzas del Cielo'".
Lo dicho: Argentina, octavo país más grande del mundo y miembro del G20, está regida por un gobierno que se dice convencido de que su poder viene de las fuerzas del cielo. Y para ayudar a esas fuerzas celestiales, el ejército de redes sociales del "mago" Caputo.
"Son conocidos en X (exTwitter) por sus seudónimos, donde tienen cientos de miles de seguidores",. detalló recientemente "Clarín".
"Juan Carreira, alias Juan Doe; Daniel Parisini, Gordo Dan; Franco Antunes, Fran Fijap; Luciano Cabrera, El Trumpista; Diego Macana Roa, Escuela Austríaca de Economía; y Esteban Glavinich, aliasTraductor Te Ama, entre los principales tuiteros, cuyos posteos son compartidos todos los días por cientos de seguidores libertarios, incluyéndolo a Milei. El impulsor de esta estrategia de comunicación digital es Caputo, que maneja un equipo oficial en Casa Rosada y una estructura paraestatal -donde talla fuerte Fernando Cerimedo- a la que provee de fondos y contenidos para ser difundidos en forma permanente".
¿Quién es Cerimedo? Un experto en "milicias digitales" que trabajó en Brasil con Jair Bolsonaro y hoy es uno de los señalados en la causa por intento de golpe de Estado en enero de 2023 que investiga el Supremo Tribunal Federal (STF).
Otro hombre fundamental para Caputo es su amigo Rodrigo Lugones, con el que compartían una consultora antes de la victoria de Milei. Lugones vive hoy en España, pero sigue manteniendo un muy fluido contacto con Caputo e influyendo en muchas decisiones importantes.
"Con videos, fotos y mucho trabajo de archivo y edición de todos los programas de los medios tradicionales y las redes sociales, los tuiteros libertarios militan el apoyo a Milei y a las políticas oficiales, además de hostigar a periodistas independientes y dirigentes opositores al gobierno nacional", resume "Clarín".
Uno de los últimos trabajos complejos en manos de Caputo es el que involucra al juez Ariel Lijo. Milei lo situó en la Corte Suprema por decreto, pero Lijo es un juez altamente controvertido, conocido por demorar por años y años causas judiciales según las necesidades políticas. Su imagen no es precisamente la mejor, pero el "mago del Kremlin" viene tejiendo y tejiendo con paciencia para que Milei, un presidente en hiper minoría parlamentaria, logre lo que a primera vista sonaba imposible: ser el eje absoluto e indiscutido de la política argentina.