Todo reality tiene una norma que año tras año ha sido inamovible: no se puede recibir información del exterior a no ser que suceda algún hecho sumamente grave, como por ejemplo una enfermedad o el fallecimiento de alguien del entorno del concursante. Supervivientes no es diferente. De hecho, en Supervivientes es más importante, si cabe. Es cierto que esta norma se cumplía a rajatabla en los primero años de la llegada de los realities a la televisión y que con el paso de los años se ha ido suavizando. Hoy por hoy no es raro que los concursantes contacten con familiares que les hagan llegar informaciones tipo, el apoyo que tienen fuera o que todo en el exterior está bien. Con Supervivientes lo vimos el pasado jueves con Makoke o antes con Terelu Campos. Ya no sorprende.
Lo que sí sigue estando completamente prohibido es revelar cualquier tipo de información específica. Anoche, Supervivientes, por primera vez, se saltó sus propias normas para comunicar un hecho que ha cambiado la vida de Damián Quintero, el ya podemos decir campeón del mundo de karate. La pregunta era si revelarle dicha información supone realmente un cambio radical en su vida, si le aporta algo en Supervivientes, si no se podía esperar a su regreso a España. Sí, es una información para sentirse orgulloso, una información que cambia su carrera deportiva, pero su estancia en Supervivientes se queda igual se la hubieran dicho o no. La diferencia, que ahora Damián Quintero cuenta con un empuje moral que hasta hace unas horas no tenía. Y eso, se mire como se mire, no es justo para el resto.
Avisó Sandra Barneda al inicio de Supervivientes: Conexión Honduras que había dos pergaminos, uno en plató y otro guardado en una urna en Cayos Cochinos. El segundo, el que custodiaba Laura Madrueño "va a cambiar la vida de un concursante", dijo Sandra Barneda. "Hoy por primera vez nos vamos a saltar las normas de no revelarles información. Se lo vamos a contar a uno de los concursantes debido a la relevancia de lo ocurrido", sentenciaba Laura Madrueño. Y así se lo hicieron saber a todos los concursantes que durante el programa de anoche se pasaron buena parte especulando con qué podía ser.
Borja tiró de futuro embarazo, otros dudaban si sería algo bueno o algo malo. Un gancho para el espectador muy bien montado y, entre otros motivos, necesario, pues si no fuera por Montoya, Anita, Laura Cuevas o Carmen Alcayde -que por muy hasta el moño que estemos de ellos como salgan expulsados se acabó la parte reality de Supervivientes-, el resto de concursantes son únicamente concursantes de supervivencia. No generan tramas, no sigue las que generan los demás y no dan el juego imprescindible para aguantar tantas semanas en un reality.
Es muy complicado sostener tres galas semanales de casi cuatro horas cada una sólo con pruebas de supervivencia y algo de la convivencia. Hay que quebrarse la cabeza, y la jugada de anoche con los pergaminos, respondía a eso, pues la información que Supervivientes reveló a Damián Quintero no era una información del exterior de tanta importancia como para revelarla. La información era Damián Quintero se ha convertido en campeón del mundo y de Europa de karate después de que el número uno haya sido descalificado. La noticia es relevante, por supuesto; es un hito en la historia del deporte español, claro que sí; ¿pero cambia algo que Damián Quintero se entere ahora en lugar de cuando vuelva a España? No.
"Damián, en las últimas horas ha ocurrido algo en España que es necesario que conozcas. Por primera vez en Supervivientes, y dada la relevancia de lo acontecido, es fundamental que leas con atención", arrancaba el pergamino que Laura Madrueño entregó a Damián en el Oráculo de Poseidón.
"En el último campeonato del Mundo, lograste la medalla de plata, lo que te convertía en subcampeón de Karate, de la misma forma, también te convertiste en subcampeón europeo. El pasado viernes, se conoció que Ali Sofuoglu, el actual campeón del mundo y de Europa, ha sido sancionado por la Federación Mundial de Karate por imcumplir el regalmento. La medalla de Oro es para tí y te conviertes en actual campeón del mundo y campeón de Europa", finalizaba el pergamino ante la alegría de Damián Quintero. Laura Madrueño le hacía entrega de una medalla de oro simbólica y el concursante dedicaba su victoria a su padres: "Al fin lo conseguí, por Dios. Se lo dedico a mis padres, que siempre me han perseguido por todo el mundo, a mi mujer, a mi hija, a mis entrenadores, a todo el equipo, a toda España y al mundo entero".
¿Qué está ocurriendo con las expulsiones en Supervivientes?
Subidón de moral para el karateka, en una noche en la que tuvo sus más y sus menos tras las acusaciones de Carmen Alcayde de tratarla diferente por ser mujer -razón no la falta-. La cuestión es si dicha información valía tanto la pena como para que Supervivientes se saltase sus propias reglas. El reality es muy puntilloso con esta norma. Lo ha sido siempre, incluso cuando les pilló la pandemia en medio concurso. En aquella ocasión Jorge Javier Vázquez informó a todos los concursantes de la situación que se estaba viviendo en el mundo y de que todos sus familiares estaban bien. Era lógico. Lo que se estaba viviendo en el mundo fue algo excepcional y, además, provocó que aquella edición de Supervivientes se tuviera que alargar varias semanas. Sin embargo, el haber conseguido campeón del mundo y de Europa no es una información trascendental. De hecho, no cambia nada de Supervivientes y es algo que Damián Quintero podría haber sabido a su regreso. Lo único que provoca es subir el ánimo al karateka, ¿y los demás?
Aquí viene el segundo pergamino, el que Sandra Barneda guardó hasta el final del programa de anoche, y del que sólo se enteraron los espectadores. Era un pergamino con un destinatario, Almacor, pero que abre una puerta habitual en Supervivientes a todos los concursantes: a partir del martes comienzan las visitas de los familiares y la primera será Elena, la novia de Almacor. Esto es desde hace mucho tiempo parte de Supervivientes. Lo que no es muy habitual es lo que está sucediendo con las expulsiones.
Anoche, se produjo la segunda expulsión definitiva de Supervivientes 2025: Ángela Ponce. De nuevo, una mujer. La primera fue Samya y, ahora, ha sido Ángela. A esto hay que sumarle los abandonos: Beatriz Rico, Terelu Campos y Rosario Matew. Está produciéndose una escabechina femenina en Supervivientes 2025. De hecho, en Playa Misterio son casi más que en Playa Furia. Los equipos están mermados y desequilibrados y, aunque la organización de Supervivientes, hizo movimientos para igualar las fuerzas la semana pasada, cada vez hay menos mujeres en el concurso. Sólo quedan Anita Williams, que va a pasar unos días enjaulada con Montoya tras saltarse las reglas y cruzar el muro que separa Playa Calma y Playa Furia: Carmen Alcayde, Gala y Laura Cuevas. Y encima Gala no está pasando por su mejor momento. Anoche, Sandra Barneda conectó para hablar con ella después de unos días complicados por problemas con la espalda que le está mermando la moral y la fuerza.
Anita, además, está nominada, también Gala, y huele a que el próximo jueves la que dice adiós a la aventura y es enviada a Playa Misterio va a ser Gala, una fémina más, lo que va a dejar a Anita, Carmen Alcayde y a Laura Cuevas como las únicas representantes femeninas de Supervivientes, aunque en Playa Misterio estén Nieves y Makoke.