Para entender por qué Javier Milei está contra las cuerdas conviene mirar a España. A Gerona, donde vive parte del año el hombre que sabe demasiado. Y a Santiago Abascal, para adentrarse en la particular psicología del presidente argentino.
En Gerona, cuando no está en Texas, vive unos meses al año Hayden Mark Davis, CEO de Kelsier Ventures, la compañía que impulsó el lanzamiento de $LIBRA, el meme coin que promocionó Milei. Esa cripto inversión le generó pérdidas millonarias a muchos y ganancias a unos pocos que disponían, a todas luces, de información privilegiada. Davis, un rubio corpulento de 35 años, forma parte de un clan familiar que completan su padre, Charles Thomas, su hermano Gideon, COO de la compañía, y su madre, Emily. Todos están en el negocio.
«El padre estuvo preso al menos un año en una prisión federal de Estados Unidos, luego encontró la fe y se fue con la familia a vivir a Gerona. Ahí tienen la base de operaciones. Tom, como llaman al padre, habla un buen español, pero a Hayden le cuesta y se mueve con un asistente, Arturo, que es español», explica a Crónica Hugo Alconada Mon, uno de los periodistas de investigación más renombrados de América Latina y conocedor del cripto escándalo de Milei. «Como grupo familiar están en múltiples inversiones: cripto, meme coins, NFT... Están con la cañita de pescar todo el tiempo», grafica.
En efecto, Davis padre estuvo preso, y él mismo se lo contó a sus hijos en el podcast de irónico nombre que comparten Hayden y Gideon, Young, Dumb and Woke (Joven, tonto y woke): «Mi infancia fue de todo menos normal, con un padre biológico ausente y un padrastro que era un militar alcohólico y abusivo. A los 18 experimenté una grave crisis suicida. Años después, el FBI me detuvo por falsificación de identidad. Confesé incluso delitos de los que el FBI no estaba al tanto. Me condenaron a un año de prisión, en vez de los 60 o 70 posibles».
Tras cumplir la condena, Tom se convirtió en pastor para jóvenes y participó activamente en obras de caridad. Ha escrito cinco libros, entre ellos Confesiones de un buen muchacho cristiano. Sus hijos lo presentaron en el podcast como «el hombre más interesante del mundo».
LA RED DE LOS DAVIS
Los Davis cuentan con contactos potentes: Emily es amiga de Melania Trump, la primera dama estadounidense. La familia Davis estuvo tras el lanzamiento del meme coin $MELANIA. En ese caso fueron más específicos, no se anduvieron con vueltas, utilizaron el nombre de la persona en cuestión. Con Milei fueron algo más sutiles y apelaron a su signo zodiacal: libra.
The Big Whale, un sitio especializado en el mundo cripto, reveló que los Davis tenían en la mira al gobierno de Nigeria para replicar la experiencia argentina, pero ante el escándalo el proyecto fue paralizado.
MILEI, EL BUEN PAGADOR
Una pregunta legítima es la de cómo logró el joven Davis llegar a Milei. Y es ahí donde la figura del líder de Vox, Abascal, ayuda a entender mejor lo que probablemente sucedió. Cada vez que se encuentra con Abascal, Milei lanza una sonora exclamación, los ojos le brillan, el afecto se advierte sincero. Lo dijo una y otra vez: cuando casi todos lo despreciaban, cuando casi todos se reían de él a sus espaldas, Abascal estuvo ahí para apoyarlo y darle un lugar.
«Milei se ha comportado como un gran pagador para aquellos que lo trataron bien», destaca Alconada Mon. «Eso es lo inquietante de los Davis. Buscaban cómo llegar a Milei, y encontraron a Mauricio Novelli, un trader que se autodefine como campeón mundial, que conoce a Milei desde por lo menos 2020. Novelli contrató por entonces a Milei y Agustín Laje (hoy jefe del think tank del mileísmo) como capacitadores de N&W Professional Partners. Contrata al que sería pocos años después presidente de Argentina: Milei daba cursos de Economía, de bitcoins. Y con Novelli sucedió lo mismo que pasó con Santiago Abascal, que Milei siempre destaca que lo trataba bien cuando nadie se lo tomaba en serio, y que por eso siempre estará a su lado. Así, el cripto inversor Hayden Mark Davis logra llegar a Novelli, que le abre las puertas de la Casa Rosada y el acceso a Milei».
Otros no llegaron: Charles Hoskinson, dueño de Cardano y figura reconocida del mundo cripto, intentó lograr una reunión con Milei, pero no pudo. Entonces apareció Novelli, acompañado de Manuel Terrones Godoy, nacido en España, pero residente en Argentina desde que era niño, y al que Alconada Mon define como alguien tan confiable como un personaje de Nueve reinas, aquella película de Ricardo Darín, hace ya 25 años, que era un canto a la estafa.
"COSAS MÁGICAS PASARÁN"
El propio Hoskinson mencionó que Novelli y Terrones Godoy se presentaron como «los abrepuertas de Milei». Con dinero de por medio, «cosas mágicas pasarán», le decían. El empresario, co-fundador de Ethereum, llegó a Argentina en octubre de 2024 con la expectativa de un encuentro con el presidente y se fue apenas con una foto grupal. En el medio, un Tech Forum 2024 en el que a cada paso que daba recibía propuestas para conectarlo con el gobierno argentino, siempre y cuando pagara.
Hoskinson les decía a todos que no, que él no podría pagar, porque quedaría entonces sujeto a la ley que combate la corrupción de estadounidenses en el extranjero, la Foreign Corrupt Practices Act (FCPA). Pero Hayden sí logró el acceso a Milei. Aunque no haya pruebas por el momento, hay una conclusión que es inevitable. Y si a eso se suman los mensajes revelados por Coin Desk, en los que Hayden aparece diciendo que él «controla» a Milei a través de su hermana, Karina —«Le envío dinero y firma lo que yo quiera»—, la historia crece en complejidad y claridad a la vez. El gobierno argentino niega terminantemente lo revelado y desde el entorno de Davis no reconocen los mensajes.
Hoskinson cree saber qué sucedió: «Usaron al presidente de Argentina básicamente para hacer un montón de dinero. Y lo dejaron, básicamente, para limpiar el desastre después de que se fueron».
La historia está lejos de haberse cerrado, porque crece la certeza de que Milei y Davis se coordinaron para apretar el botón y postear en redes sociales casi al mismo tiempo. Ambos, a las 19:01 del Día de San Valentín. No es amor, pero se parece un poco.