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Guerrra Israel-Gaza

Moodrick-Even: "La destrucción de Hamas justifica posibles daños civiles"

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Experta en Derecho humanitario internacional y profesora de la Universidad de Ariel (Israel), califica de intento de "genocidio" el ataque terrorista a Israel del 7 de octubre

Hilly Moodrick-Even Khen
Hilly Moodrick-Even KhenE. M.

Experta en Derecho humanitario internacional, la doctora Hilly Moodrick-Even Khen, profesora de la Universidad de Ariel, en Israel, atiende a EL MUNDO por videoconferencia después de que se viera obligada cancelar por el atentado de Hamas su participación en un seminario en la facultad de derecho de la Universidad de Barcelona. Habitualmente crítica con el Gobierno de Netanyahu, cree que ahora es el momento de la unidad del pueblo israelí contra el terrorismo.

El Gobierno de Israel define el ataque de Hamas como su 11-S y asegura que fue una delcaración de guerra. ¿Lo comparte?
Sí. Para la sociedad israelí ha tenido un efecto parecido al 11-S para EEUU. Pero sobre todo hemos de definir el ataque del 7-O como un genocidio. Es lo que realmente intentó Hamas. El genocidio es un crimen definido por la comunidad internacional desde 1948 y fue aceptado después de la Segunda Guerra Mundial y el Holocausto judío. La comunidad internacional entendió que éste es un crimen específico, que tiene elementos físicos, como los asesinatos o provocar situaciones extremas que llevan a la muerte a miles de personas, pero que lo define principalmente por la voluntad de eliminar a todo un colectivo de personas. Lo que pasó en Bosnia en 1995, o en Ruanda en 1994. Así que la autodefensa de Israel mediante una guerra contra Hamas está justificada.
Esta idea del genocidio es controvertida -Palestina acusa de lo mismo a Israel- y seguramente no encuentra todavía muchos apoyos en la opinión pública occidental, donde sí se entiende, en cambio, el derecho de Israel a defenderse.
La comunidad internacional apoya a Israel, como han demostrado la visita de Joe Biden o los pronunciamientos de la UE, aunque quizá no defina la situación como genocidio. Pero ahí están las evidencias y las pruebas de la crueldad, la pasión y hasta la facilidad con que Hamas perpetró su ataque con intención de matar el mayor número de judíos posible y de forma indiscriminada. No espero que la comunidad internacional intervenga en la guerra, pero nos sentimos apoyados y espero que Europa mantenga este apoyo cuando veamos situaciones duras en Gaza.
Una de las demandas internacionales es que Israel distinga entre Palestina y Hamas, evitando la muerte y sufrimiento de la población civil. ¿Está de acuerdo con una posible invasión terrestre de Gaza?
Nosotros queremos que las acciones que lleve a cabo el Gobierno israelí respeten el principio de proporcionalidad, distinga entre combatientes y civiles. Pero, cuidado, el principio de proporcionalidad no es el que muchos medios de comunicación dicen o muestran. Ya que la prensa se queda muchas veces en lo superficial, en la foto llamativa sin poner contexto. Hemos de tener claro que Hamas es una organización terrorista que sabe utilizar muy bien la propaganda y manipular la realidad, utilizando a civiles como escudos humanos, guardando munición y combatientes en hospitales, mezquitas, escuelas... En este caso, pues, están justificados posibles daños civiles para conseguir el objetivo legítimo de derrotar a Hamas. Le pondré un ejemplo extremo: si para acabar con Hitler hubiera sido necesario matar a un millón de civiles, hubiera estado justificado. Entiendo que defender públicamente esta posición respecto a Gaza es difícil cuando se ven fotos de civiles y su sufrimiento, pero es necesario llevar a cabo estas acciones militares contra los terroristas.
¿Es la posición mayoritaria en la sociedad israelí? Vemos cómo algunos judíos de Estados Unidos se han manifestado para que Israel pare la ofensiva sobre Gaza.
Antes del ataque de Hamas había muchas voces diferentes, pero ahora hay bastante unidad en Israel respecto a la necesaria respuesta militar. Aunque obviamente no vamos a justificar cualquier acción del Gobierno, estamos atentos y habrá seguro voces críticas. No obstante, la sociedad está mucho más unida y ha decidido aparcar momentáneamente sus disputas políticas sobre la reforma constitucional que tanto nos ha dividido. Luego, está el problema de los rehenes que tiene Hamas, esto puede provocar división en Israel sobre las acciones militares y diplomáticas que tomar al respecto.
Destaca la unidad, pero teme que el ataque de Hamas, penetrando por una de las fronteras en teoría mejor defendidas del mundo, tenga consecuencias psicológicas -miedo, inseguridad, paranoia...- para la sociedad israelí.
Desde luego, habrá consecuencias propias del postrauma. Espero que ese cambio sea para mejor y también ayude a cambiar la visión del mundo respecto al verdadero peligro del integrismo islámico. Una de las cosas que han cambiado tras el atentado, y que deberá debatirse en el futuro, es el contrato político y social del pueblo israelí con su Gobierno, ya que había una obligación de su parte por garantizar nuestra seguridad. Esperábamos que protegiera a los ciudadanos y ahora sentimos que se ha abierto una brecha al respecto.
¿Entiende que un ataque de esa envergadura cogiera al ejército de Israel totalmente desprevenido?
Después de la operación militar se deberá iniciar una comisión oficial sobre lo que ocurrió y decidir quién puede asumir la responsabilidad por este fallo del Gobierno y el ejército. Es necesaria esa investigación para entender cómo fue posible el ataque, qué fallo, y corregir los errores para que no se repitan. Debemos descubrir qué pasó.
Las voces críticas con Israel que han surgido en Europa son básicamente de extrema izquierda y derecha. ¿Son expresiones nuevas del viejo antisemitismo?
Desde luego. Se pueden ver en algunos medios de comunicación, en expresiones utilizadas por políticos. Para nosotros este tipo de antisemitismo es otro enemigo con el que tenemos que luchar.