"Vengo a esta manifestación y no a la de la tarde porque yo no estoy a favor de que se regularice la prostitución, estoy a favor de la abolición", dice una mujer de 71 años que sigue la marcha acompañada de dos amigos. "Y en contra de los vientres de alquiler, que son una aberración. Y las de esta tarde están a favor de eso", añade apuntando dos de las grandes cuestiones que enfrentan al feminismo -junto con la ley Trans- y que son la causa de que el movimiento celebre por separado por segundo año consecutivo el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer.
La mujer camina por la madrileña calle de Alcalá, al lado de una pancarta en la que se lee "Mujeres, iguales y libres" y que sostienen un nutrido grupos de ministros y cargos del PSOE, que apoya esta primera marcha, la convocada a las 12.00 horas por el Foro de Madrid y el Consejo de las Mujeres, las llamadas feministas clásicas, y que discurre entre Gran Vía y Plaza de España.
Están la presidenta del Congreso de los Diputados, Francina Armengol, la ex vicepresidenta del Gobierno y diputada, Carmen Calvo, y los ministros Diana Morant (Ciencia), Isabel Rodríguez (Vivienda), Pilar Alegría (Educación y portavoz del Gobierno), Fernando Grande-Marlaska (Interior) y también la recién nombrada ministra de Igualdad, Ana Redondo, que ha coreado con entusiasmo, acompañándolos de palmadas, canticos como "ni una menos, libres no queremos".
La manifestación de las feministas clásicas ha recuperado así la presencia de la titular de Igualdad, después de que la predecesora en el cargo, Irene Montero, participara el pasado 25N en una de las convocatorias alternativas organizada por la Comisión 8M. Así lo ha hecho también este año la dirigente de Podemos, que se ha sumado a la segunda marcha, que ha dado comienzo a las 18.00 horas y ha discurrido entre Atocha y Callao.
A esta segunda manifestación se ha unido también la recién nombrada ministra de Juventud e Infancia, Sira Rego, con lo que el Gobierno ha acudido de nuevo dividido a la cita. No ha participado la vicepresidenta segunda y líder de Sumar, Yolanda Díaz, por motivos de salud.
A la "unidad" del feminismo ha apelado la ministra de Igualdad socialista en declaraciones a los medios antes del inicio de la manifestación. "Mi primer mensaje es apelar a la unidad, da lo mismo dónde nos manifestemos, mis hijas saldrán esta tarde en la manifestación en Valladolid y yo estoy aquí con mi partido como tantas otras veces, eso no es lo significativo, lo importante es que se escuche alto y fuerte la voz de las mujeres y de todas las personas feministas", decía. "Estar divididas es una baza que tiene Vox y la derecha", añadía.
"A ponerse medallitas. No sé qué coño hacen aquí si no son abolicionistas", nos decía una mujer ataviada con el chaleco de las organizadoras, cuando, al llegar a la manifestación, preguntamos dónde se encuentran los ministros. Los cargos socialistas se han colocado al final de una marcha poco concurrida y que ha competido en número con la marabunta de gente de compras que, atraídos por las rebajas del Black Friday, ocupaban las dos enormes aceras de Gran Vía. A esta manifestación han asistido 2.000 personas según la Delegación del Gobierno y 25.000 según las organizadoras.
La cifra da cuenta de cómo ha ido mermando la participación tras la división feminista. Así mientras que en años anteriores más de 300.000 mujeres salieron a la calle a reivindicar sus derechos, el año pasado no llegaron ni a las 30.000 en las dos manifestaciones, según datos de la Delegación del Gobierno.
Unos metros por delante de los ministros, tras la pancarta "93 mujeres asesinadas en lo que va de año", desfilaban un centenar de mujeres completamente vestidas de blanco y con máscaras también blancas. Las que no sujetaban el mensaje, enarbolaban cada una un cartel con el nombre de cada una de las asesinadas, víctimas de violencia de género y de otros feminicidios: "Paloma Pineda, 46 años, Valladolid", "Elizabeth, 44 años, Balaguer (Lleida)", Erica Vanesa, 22 años, Utrera (Sevilla)", "Madeleine Viluta, 20 años, Burgos (Castilla y León)"...
La manifestación, cuyo lema principal ha sido Contra la violencia hacia las mujeres. Unidad ciudadana y respuesta institucional, ha acabado con la lectura de un manifiesto. En él piden a los "organismos públicos" que sean "más diligentes, más eficaces y resolutivos" en la lucha contra la violencia machista contra las mujeres y que haya "Tolerancia cero con los discursos machistas de la extrema derecha, instalada ya en las instituciones".
En el último año, desde el 25 de noviembre de 2022, subrayan, 53 mujeres han sido asesinadas por la violencia de género (otros tres casos se encuentran en investigación), además de dos menores, víctimas de la violencia vicaria. Han denunciado también que "la violencia sexual en el ámbito de la pareja, expareja o relaciones amistosas está aún invisibilizada, ya que no se entiende como violencia" y recuerdan que la criminalidad sexual ha subido un 13% en 2023 y que los casos anuales de 'manadas' han subido un 54,4% 2016 y 2021.
En su manifiesto, también denuncian "los crímenes de pederastia perpetrados durante años por la Iglesia Católica y otras confesiones religiosas" y " la impunidad en la explotación reproductiva de las mujeres en el extranjero", en referencia a los vientres de alquiler.
Podemos y Sumar, también divididos
La división del movimiento feminista ha vuelto a quedar patente esta tarde en las calles de Madrid. Podemos y Sumar, el espacio con el que el partido morado concurrió a las elecciones generales, han acudido por separado a la manifestación convocada a las 18.00 horas, hasta el punto de que ni se han cruzado visualmente.
La ministra de Juventud e Infancia, Sira Rego, que ha sido la representante de la formación de Yolanda Díaz, ha citado a los medios de comunicación en la Cuesta de Moyano. Al mismo tiempo, la pancarta encabezada por Irene Montero, a su vez, era desplegada a unos 200 metros de allí.
La ex titular de la cartera de Igualdad ha acudido a la manifestación arropada por Victoria Rosell, Ángela RodríguezPam e Isa Serra, que han integrado su núcleo duro durante estos de gestión. No estaba en cambio la secretaria general de Podemos, Ione Belarra, su otro gran apoyo.
"Irene Montero, te quiere el mundo entero" e "Irene, hermana, aquí está tu manada" han sido algunas de las frases coreadas por los manifestantes que han desfilado tras la pancarta del partido 'morado', con el lema Feministas para transformar el mundo.
Por su parte, la ministra de Juventud e Infancia ha tenido palabras de reconocimiento para la gestión en esta materia realizada durante la pasada legislatura, si bien ha recalcado que el Gobierno tiene que seguir "ampliando derechos y reforzando todo lo que tiene que ver con la libertad de las mujeres y la erradicación de la violencia contra las mujeres". En este sentido ha condenado los 52 asesinatos machistas que se han contabilizado en lo que va de año y la última violación grupal a una menor.