ANDALUCÍA
ANDALUCÍA

La lluvia recogida tras la DANA permite rebajar las restricciones por la sequía en Málaga y en el Campo de Gibraltar

Imagen del pantano de Guadalhorce, tomada el 10 de octubre de 2024, antes de las lluvias torrenciales de finales de octubre y principios de noviembre.
Imagen del pantano de Guadalhorce, tomada el 10 de octubre de 2024, antes de las lluvias torrenciales de finales de octubre y principios de noviembre.JORGE ZAPATAEFE
Actualizado

La Comisión de Gestión de la Sequía de la demarcación hidrográfica de las Cuencas Mediterráneas Andaluzas se ha reunido este jueves en convocatoria extraordinaria y ha acordado abrir un poco la mano en lo que al consumo de agua se refiere y flexibilizar las medidas de ahorro en algunos sistemas en Málaga y el Campo de Gibraltar, áreas especialmente castigadas por la escasez de lluvias del último año.

El motivo de este cambio de proceder de la comisión se debe a que el agua almacenada en los embalses ha aumentado considerablemente como consecuencia de los episodios de lluvias torrenciales que han acompañado al paso de dos gotas frías(DANA) muy seguidas este otoño y que, al igual que la sequía, también han afectado a la región.

Entre las medidas aprobadas por la comisión tras realizar el análisis de la situación hidrológica de la demarcación y que vienen a modificar las adoptadas en la reunión que se celebró el pasado mes de octubre, está la de aumentar el consumo máximo de agua por habitante y día tanto en las zonas de la Axarquía, Málaga capital y el Campo de Gibraltar, como en la Costa del Sol Occidental. Se trata de garantizar el abastecimiento humano, pero también de mitigar el impacto social, ambiental y económico de la falta de agua.

Aguas subterráneas

En el sistema Guadalhorce-Limonero, que abastece a la ciudad de Málaga, se mantiene la suspensión de la transferencia a la Viñuela-Axarquía y ,de acuerdo con el Plan Especial de Sequía (PES), se maximizará el uso de los recursos subterráneos y fluyentes del sistema de explotación para el abastecimiento urbano. Y en el sistema Viñuela-Axarquía se potenciará, así mismo, el uso de los recursos subterráneos y fluyentes del sistema de explotación para el abastecimiento urbano, lo que incluye seguir empleando los pozos del Chíllar.

Así, en Málaga y la Axarquía el consumo máximo permitido pasa de 180 litros por persona y día a 200 litros.

En lo que se refiere a la Costa del Sol, el gasto de agua para uso urbano no podrá superar los 225 litros por habitante y día, si bien esto supone 25 litros más de lo permitido hasta la fecha. De manera que en esta región se maximizará el uso de los recursos no convencionales como las aguas procedentes de la desalación y las regeneradas. En este último caso y, una vez satisfechos los derechos concesionales, se podrán emplear los recursos que no hayan sido utilizados -siempre con la correspondiente autorización administrativa- en otros usos tales como el riego de jardines.

En los sistemas restantes que componen la demarcación hidrográfica de las Cuencas Mediterráneas no se producen cambios. De este modo, el Campo de Gibraltar y Cuevas de Almanzora continuarán con un máximo de 200 litros por persona y día, y Rules-Béznar y Beninar seguirán sin restricciones.

De escasez severa a moderada

Para las zonas sin regulación, se aprueba el paso del estado de una situación de excepcional sequía con escasez severa a escasez moderada en el sistema de la Cordillera Penibética entre las cuencas del Guadiaro y Guadalhorce, así como en la cabecera del Guadalhorce. Si bien en el uso urbano, los volúmenes suministrados en depósitos de cabecera municipal o toma de red colectiva no podrán superar la dotación de 235 litros por habitante y día considerando el total de recursos. En el sistema de la Cuenca Baja del río Guadalhorce no podrán superar la dotación de 200 litros por habitante y día; y para el sistema Cuenca del río Guadiaro no se fijan restricciones.

En los próximos meses se continuará con el seguimiento detallado de la evolución de recursos y demandas, así como con el análisis de la aplicación de las medidas adoptadas para conocer si es necesario poner en marcha nuevas actuaciones.

Las decisiones de la Comisión de la Sequía adoptadas en la reunión extraordinaria de este jueves se revisarán a comienzos del próximo año 2025 y se mantendrán o se modificarán en función de la situación hidrológica.